

Sistemas de fijación para la inestabilidad de la columna
Los casos de hernia discal pueden implicar una inestabilidad de las vértebras, que se puede corregir mediante cirugía de columna. Descubre las últimas técnicas empleadas por el especialista
La Columna Vertebral está compuesta de 33 huesos en recién nacidos y 26 en adultos debido a la fusión de las vértebras sacrales y coccígeas durante el desarrollo. Las vértebras protegen la médula espinal y le permiten mantenerse de pie e inclinarse.
Las vértebras se apilan un grupo sobre otro en cuatro regiones:
Vértebras cervicales (C1 - C7). La columna cervical se subdivide en dos partes:
Los huesos cervicales están diseñados para permitir la flexión, extensión, y giro de la cabeza. Estos son más pequeños que las demás vértebras, así permiten una mayor cantidad de movimiento.
Vértebras torácicas (T1 - T12). Las vértebras torácicas aumentan de tamaño de la T1 a la T12
El movimiento que se produce en la columna torácica es principalmente rotación. Las nervaduras impiden la flexión hacia el lado. Una pequeña cantidad de movimiento se produce en la flexión hacia delante y hacia atrás.
Vértebras lumbares (L1 - L5). Las vértebras lumbares varían de tamaño de la L1 a la L5. Estas vértebras cargan con la mayor parte del peso del cuerpo y el estrés biomecánico relacionado.
Región sacra. El sacro está ubicado detrás de la pelvis. El sacro está formado por cinco huesos (abreviados S1 a S5) fusionados en una estructura triangular. El sacro se acomoda entre los dos huesos de la cadera que conectan la columna a la pelvis. La última vértebra lumbar (L5) se articula (se mueve) con el sacro.
Coxis. Inmediatamente debajo del sacro hay cinco huesos adicionales fusionados para formar el coxis (rabadilla)
La Columna Vertebral de los recién nacidos está compuesta de 33 huesos, la de los adultos por 26.
Algunas de las funciones de la Columna Vertebral son:
Los problemas que pueden alterar la estructura de la Columna o lesionar las vértebras y el tejido que las rodea pueden ser varios:
En repetidas ocasiones, las enfermedades que afectan a la columna suelen provocan dolor cuando los cambios óseos presionan la médula o los nervios. Otro de los efectos es la limitación del movimiento.
El tratamiento varía, obviamente, dependiendo de la enfermedad que afecte la columna, pero en muchas ocasiones se recurre a aparatos ortopédicos para la espalda y a la cirugía.
Los expertos en las patologías de la Columna son: Traumatólogo y el Neurocirujano.