El Asma es una enfermedad crónica que afecta las vías respiratorias de los pulmones. Estas vías respiratorias son tubos que permiten que el aire entre y salga de los pulmones.
¿Cómo se diagnostica el Asma?
El Asma es una enfermedad variable que se caracteriza por episodios recurrentes, es decir, que van y vienen con una frecuencia variable entre pacientes. Esto se debe a lo que llamamos broncoespasmo, que significa una Obstrucción Bronquial que suele ser reversible.
La obstrucción se manifiesta con:
- Dificultad para respirar
- Sibilancias (silbidos en el pecho) audibles en muchos casos por los propios pacientes
- Episodios o crisis que pueden generar una gran dificultad respiratoria, en algunos casos requiriendo atención médica de emergencia
El diagnóstico necesita de una evaluación clínica, ya que la mayor parte de los casos se identifican mediante los síntomas que reporta el paciente.
Para confirmar el diagnóstico, se pueden realizar estudios complementarios como:
- Espirometría con prueba de reversibilidad, para detectar si la obstrucción es reversible
- Pruebas de Broncoprovocación, que evalúan la Hiperreactividad Bronquial
- Estudios de laboratorio y medición del óxido nítrico exhalado
- Estudios de imagen para descartar otras patologías
¿Existen diferentes tipos de Asma?
El Asma es una enfermedad heterogénea y se pueden reconocer básicamente dos tipos principales:
- Asma Alérgica o Atópica: es la más frecuente y se desencadena por la exposición a alérgenos o estímulos ambientales, provocando una respuesta inflamatoria en los bronquios
- Asma no Alérgica: no se identifica un factor desencadenante claro, pero los pacientes presentan manifestaciones clínicas similares
El diagnóstico diferencial del Asma se realiza principalmente con:
- Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC): se diferencia del Asma porque no es reversible
- Bronquiectasias: se trata de una Dilatación Bronquial Crónica con síntomas distintos
- Obstrucciones en las vías respiratorias superiores: son cuadros raros, pero es importante descartarlos
¿Cuáles son los desencadenantes más comunes del Asma?
Los principales gatillos del Asma incluyen:
- Alérgenos ambientales (polen, pelo de animales, ácaros del polvo, entre otros)
- Polución y contaminantes ambientales
- Infecciones virales respiratorias
- Aire frío o seco, especialmente durante el ejercicio
¿Puede afectar a personas de todas las edades?
El diagnóstico de Asma en niños pequeños puede ser difícil debido a la similitud con otras enfermedades respiratorias. Sin embargo, en la edad escolar ya es posible establecerlo con más certeza. Aproximadamente el 10% de la población padece Asma, aunque esta cifra varía según el entorno.
¿Qué tratamientos existen para controlar el Asma?
El tratamiento del Asma es bastante estandarizado y depende del estadio clínico y el control de la enfermedad. Se dividen en:
Tratamientos farmacológicos
- Corticoides inhalados: son la base del tratamiento
- Broncodilatadores de acción corta: para el alivio inmediato de los síntomas
- Broncodilatadores de acción prolongada: asociados al uso de corticoides inhalados
Tratamientos inmunológicos
- En casos más severos, se pueden usar anticuerpos monoclonales para bloquear vías inflamatorias específicas
¿Es posible prevenir los ataques de Asma?
El Asma es una enfermedad controlable con el tratamiento adecuado, mejorando la calidad de vida de los pacientes y reduciendo la frecuencia de las crisis.