La Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica (ABPA) es una reacción de hipersensibilidad frente al hongo Aspergillus, que coloniza los bronquios de personas susceptibles, especialmente pacientes con asma o fibrosis quística.
La inflamación que genera puede provocar obstrucción de las vías respiratorias y, si no se trata a tiempo, complicaciones como Bronquiectasias y Fibrosis Pulmonar.
A nivel global, se estima que entre un 1 y 2% de los pacientes asmáticos y hasta un 15% de las personas con Fibrosis Quística pueden desarrollar ABPA. Mientras que, en Argentina, aunque no hay cifras exactas, se calcula que miles de pacientes permanecen sin diagnóstico oportuno, lo que retrasa el tratamiento y aumenta el riesgo de complicaciones.
¿Cuándo sospecharla?
Debés consultar si:
- Tenés Asma y tus síntomas empeoran sin causa aparente
- Presentás crisis respiratorias recurrentes a pesar del tratamiento habitual
- Tenés Fibrosis Quística y desarrollás mayor tos o secreciones espesas
Síntomas más frecuentes
Entre los síntomas más comunes de la Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica (ABPA) se encuentran:
- Tos persistente, a veces con moco espeso o con sangre
- Sibilancias (silbidos en el pecho)
- Falta de aire
- Fiebre en algunos casos
- Fatiga o cansancio prolongado
- Empeoramiento del asma o síntomas respiratorios habituales
Cómo afecta la calidad de vida
La Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica (ABPA) puede impactar profundamente en la rutina diaria:
- Mayor dificultad para respirar en actividades simples
- Limitación en la práctica de deportes o tareas cotidianas
- Aumento de las hospitalizaciones por crisis respiratorias
- Estrés y Ansiedad por la incertidumbre de nuevos episodios
Consejos útiles: Prevención y cuidados
En cuanto a la prevención y cuidado ambiental, se recomienda:
- Mantener ambientes ventilados y secos, evitando la humedad
- Limpiar regularmente aires acondicionados, humidificadores y espacios cerrados
- Evitar la exposición a mohos en jardines, depósitos o lugares con polvo acumulado
En pacientes ya diagnosticados es importante:
- Cumplir estrictamente el tratamiento indicado
- No suspender los medicamentos sin supervisión médica
- Realizar controles periódicos con el Neumonólogo
- Practicar higiene bronquial y fisioterapia respiratoria según indicación
- Llevar un estilo de vida saludable, con buena alimentación y ejercicio adaptado
Opciones de tratamiento
El tratamiento de la Aspergilosis Broncopulmonar Alérgica (ABPA) consiste en:
- Corticosteroides orales para reducir la inflamación
- Antimicóticos (ej. itraconazol) en algunos casos, para disminuir la carga fúngica
- Control del Asma o Fibrosis Quística de base, fundamental para evitar recaídas
El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden mejorar la calidad de vida y prevenir complicaciones graves.
Si tenés Asma o Fibrosis Quística y notás síntomas respiratorios que empeoran, solicitá turno con nuestro servicio de Neumonología.