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La cirugía del estrabismo permite conseguir una solución definitiva

La cirugía del estrabismo permite conseguir una solución definitiva

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La redacción de Top Doctors
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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 15/02/2019

¿En qué consiste la cirugía del estrabismo?

El estrabismo es una pérdida del paralelismo de los ojos o de la capacidad de moverse de forma coordinada  en las diferentes direcciones.  Para que esto  ocurra, el conjunto de músculos que mueven los ojos, seis en cada uno, deben tener un equilibrio en sus fuerzas; tanto en las fuerzas activas, que son las que mueven los ojos, como en las fuerzas pasivas, que son las que se oponen a este movimiento. Si el equilibrio es adecuado, los ojos se mueven de forma coordinada y mantienen la posición que se pretende alcanzar. Si este equilibrio de fuerza no es adecuado o se produce una pérdida de paralelismo o defecto en el movimiento de la rotación ocular, la cirugía del estrabismo devuelve al conjunto de músculos oculares el equilibrio de fuerzas tanto activas como pasivas, para que se recupere el paralelismo y la coordinación de movimiento en todas las direcciones. 

¿Se pueden operar los dos ojos a la vez?

Si, se pueden operar los dos ojos a la vez y de hecho la mayoría de las veces debe ser así. La labor de investigación que hemos desarrollado en este centro ha consistido en un análisis individual de cada uno de los músculos oculares para saber si se debe operar un o más músculos  de un ojo o de los dos. Ese diagnóstico que se realiza en el momento de la intervención es básico para conseguir el equilibrio de fuerzas. 

¿Qué tipo de anestesia se usará?

La anestesia que utilizamos para la cirugía del estrabismo debería ser siempre anestesia general, utilizando relajantes musculares. Lo que debemos hacer antes y durante la intervención es un diagnóstico de las alteraciones, de la elasticidad y de la longitud muscular. Esta investigación sólo se puede hacer si el paciente está con una relajación muscular adecuada, y esto sólo se puede conseguir a través de una anestesia general.

¿El resultado esperado implica una solución definitiva?  

La solución definitiva se va a alcanzar progresivamente. El estrabismo, sobre todo el infantil, es un proceso que está afectado por la maduración. De manera que desde el nacimiento o los primeros meses de vida que aparecen los primeros casos de estrabismo se van produciendo cambios físicos y de todo tipo en el organismo que hacen que también la musculatura ocular y los globos oculares cambien. Así que, la cirugía realizada a los seis u ocho meses de edad puede necesitar de nuevas actuaciones más adelante por los cambios físicos que se irán produciendo. El objetivo básico es que siempre se mantengan los ojos alineados y coordinados en sus movimientos y cuando aparezcan nuevos componentes de desequilibrio se puedan rectificar a tiempo. Los grupos de edades críticas en los que pueden aparecer variaciones que necesiten tratamiento son: entre cero y nueve años, para un tratamiento básico; entre quince y veinte años, etapa de la adolescencia muy característica de algunos cambios;  y la etapa de los treinta y cinco a cuarenta años, con el inicio de la presbicia. 

¿Qué riesgos hay en la cirugía?

En la cirugía del estrabismo hay muy pocos riesgos cuando es realizada por una persona experta que a alcanzado un diagnóstico adecuado y que sabe implementar ese diagnóstico con las pruebas inter-operatorias. Los riesgos de infección son banales, normalmente se corrigen siempre con el tratamiento post-operatorio. Riesgos más complejos vendrían básicamente de un defecto en la sutura, lo que se conoce como músculo deslizado o músculo perdido, es una desinserción del músculo recién intervenido y por lo tanto una situación de parálisis que hay que reponer lo más rápidamente posible.  

¿Cuándo se pueden reanudar las actividades normales después de la cirugía?

La recuperación de la actividad normal depende mucho de la edad, los niños pequeños se recuperan mucho más rápido que los adultos. En general, en niños entre seis meses y cuatro años, a las veinticuatro horas están normales; los adultos tardan entre dos o tres días y a veces puede prolongarse hasta una semana, todo depende obviamente de la actividad normal que esa persona realice y las exigencias que tenga. Aunque los ojos se puedan ver enrojecidos las molestias han desaparecido a las veinticuatro o cuarenta ocho horas, lo cual no impide la realización de las actividades normales, salvo el aspecto estético del enrojecimiento de la cirugía. 

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