Cirugía del vítreo o vitrectomía
La cirugía del vítreo, también conocida como vitrectomía, consiste en la eliminación total del vítreo, que es un gel transparente que rellena la cavidad posterior del ojo, la cual está tapizada al fondo por la retina.
La vitrectomía se realiza a través de 3 pequeñas incisiones en la capa rígida del ojo conocida como escalera. En estas, de menos de 1 mm cada una, se colocan sendos trucares a través de los cuales se introducen los instrumentos necesarios para la intervención. A través de un trocar se introduce una cánula de infusión que mantiene el tono ocular durante la intervención. Y a través de los otros trocares, se introduce una sonda de iluminación y el vitreotomo, un instrumento que corta y aspira el vítreo. Otros instrumentos, como pinzas, tijeras o láser se introducen al ser necesarios para la intervención.
El cirujano ve lo que está haciendo mediante un microscopio y unas lentes especiales que le permiten ver el interior del ojo mientras lo interviene. Una vez eliminado el vítreo, hay que dejar la cavidad lleva con una sustancia tamponadora, que puede ser suero, aire, gases expansibles o aceite de silicona. Excepto esta última, las sustancias son reabsorbidas por el ojo y sustituidas por suero producido por el propio ojo. Toda la intervención se realiza bajo anestesia locorregional.
Causas y riesgos de la vitrectomía
Las causas para realizar la vitrectomía pueden agruparse en pérdida de opacidad por hemorragias u opacidad causada por diabetes o infecciones por un lado, o por acceso a la retina para intervenir patologías que la afectan, como el desprendimiento de retina o enfermedades de la mácula.
A día de hoy y gracias a los avances, la vitrectomía no implica grandes complicaciones. Tras esta intervención es habitual la aparición de catarata, aunque se soluciona con una intervención de esta nueva patología. Otro riesgo es padecer hipertensión ocular tras la intervención, que se soluciona con colirios. Aunque también pueden surgir complicaciones más severas como infecciones o desprendimientos de retina.
Recuperación tras una vitrectomía
Después de someternos a una intervención de vitrectomía, la visión estará reducida y la recuperación irá desde unos días en las patologías más leves, hasta varios meses en las más graves. El reposo relativo o absoluto será necesario en todos los casos.