Apnea del sueño y ronquidos

Apnea del sueño y ronquidos

Top Doctors
Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 27/10/2018

La apnea obstructiva del sueño es un trastorno de la respiración que se produce cuando la persona que la padece duerme. La causa es que las vías respiratorias se estrechan o bloquean parcialmente, ocasionando ronquidos.

Durante la apnea obstructiva del sueño, los músculos de la parte superior de la garganta se relajan, de manera que el aire pasa con dificultad por el estrecho conducto que dejan los tejidos cerrados. De este modo, al recuperar la respiración se suele producir ronquido.

La respiración suele volver a su normalidad 30 segundos después, pero esta pausa puede ser peligrosa e incluso mortal a causa de las consecuencias que acarrea la falta de oxígeno.

Los ronquidos son el síntoma que avisa al paciente de que padece apnea del sueño. De todas formas, no todas las personas que roncan sufren apnea del sueño.

 

Causas de la apnea del sueño

RonquidosLas causas que producen la apnea del sueño principalmente son:

  • Maloclusión Clase II, por la cual el maxilar inferior es más corto que el superior.
  • Deformación del paladar
  • Cuello demasiado grande
  • Lengua grande, puesto que puede bloquear la vía respiratoria cuando se relaja al dormir.
  • Amígdalas que han crecido en exceso y pueden bloquear las vías respiratorias.

 

El principal problema de la apnea del sueño es que sucede cuando el paciente duerme, por lo que él no es consciente. Tiene que ser una persona cercana quien se dé cuenta de la patología a causa de los ronquidos y le sugiera acudir al especialista en Odontología. Así pues, la falta de sueño acaba afectando a quien padece la apnea y a quien duerme cerca.

La apnea es el causante de muchos síntomas visibles, especialmente en hombres con sobrepeso:

  • Durante el sueño: ronquidos, pausas en la respiración, movimientos frecuentes y bruscos, sudoración excesiva, falta de aire o sofocación, babeo o salivación.
  • Durante el día: falta de concentración, pérdida de memoria, cambios de humor, aislamiento, depresión, dormir a deshora o realizando tareas como conducir, cefalea matinal.

 

Si la apnea del sueño no se trata se asocia a ciertas enfermedades coronarias que pueden derivar en fatales consecuencias, como hipertensión arterial y coronaria, arritmias, accidentes cardiovasculares, muertes súbitas o infartos de miocardio.