Novedades en el cáncer de próstata

Novedades en el cáncer de próstata

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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 07/06/2019

 

Resonancia Magnética Nuclear Multiparamétrica (RMNm)

Aunque la resonancia magnética nuclear se utiliza en el cáncer de próstata desde la década de los ochenta, su utilidad se ha incrementado en los últimos años por la combinación de las imágenes convencionales T1 y T2 con varias modalidades funcionales de imagen, como la difusión (DWI), el estudio dinámico con contraste (DCEI) y la espectroscopia (MRSI). Todo ello se conoce como RMN multiparamétrica. Esta resonancia es la técnica de imagen con mayor sensibilidad y especificidad en el cáncer de próstata, ya que ofrece al especialista en Urología información para el diagnóstico, la localización y la extensión del tumor. Es útil, además, para detectar tumores de la zona anterior de la próstata que no se detectan con la biopsia convencional. Todos estos parámetros se recogen en un score de 1 a 5 (sistema PI-RADS) donde las lesiones 1 son benignas, las 2 son posiblemente benignas, las 3 son dudosas, las 4 son posiblemente malignas y las 5 son muy posiblemente malignas. Por ello, los pacientes con lesiones PI-RADS 4 y 5 deben ser sometidos a biopsia y los que presentan lesiones 3 deben ser controlados muy estrechamente.

 

Biopsia transperineal guiada con plantilla (Técnica de Braquierapia)

En la actualidad, la biopsia continúa siendo el único método para diagnosticar el cáncer de próstata. Sin embargo, es una técnica no exenta de complicaciones ya que en muchos pacientes con valores de PSA reiteradamente elevados se debe repetir varias veces. El aumento del número de cilindros obtenidos con la biopsia transperineal con plantilla, que es la misma técnica utilizada para implantar las fuentes de la braquiterapia, permite detectar tumores localizados en la zona anterior de la próstata a la que no se puede llegar con la técnica habitual de biopsia de próstata por vía transrectal. Esta técnica permite realizar un mapeo de toda la glándula prostática sin riesgo de infección y diagnosticar entre el 30% y el 40% de pacientes con cáncer que no se diagnosticarían con la biopsia de próstata convencional. La limitación de esta técnica es que se debe realizar con anestesia raquídea o general. En los casos con una biopsia convencional previa negativa, la detección con la biopsia con técnica de braquiterapia es de l55%, con dos biopsias negativas es del 42% y con tres biopsias previas negativas 34%. Con esta técnica se puede llegar a todas las lesiones observadas en la RMN multiparamétrica.

Biopsia de próstata por fusión de imágenes

La técnica más novedosa para detectar el cáncer de próstata combina las imágenes obtenidas con una RMN multiparamétrica y las imágenes obtenidas con la ecografía transrectal en tiempo real (fusión de imágenes) utilizando un programa informático para dirigir la aguja hacia las lesiones sospechosas de malignidad (PIRADS 4 y 5). Con esta técnica la necesidad de biopsias en varones con elevación del PSA descendió un 51%, el diagnóstico de cánceres de riesgo bajo descendió un 89% y la detección de cánceres de riesgo intermedio y alto aumentó un 18% comparado con las biopsias obtenidas solo con ecografía transrectal.

 

¿Qué pueden hacer los pacientes para ayudar a controlar la enfermedad?

La respuesta es cambiar los hábitos de vida y la dieta. En 2005 se publicó en la revista Journal of Urology un estudio realizado en la Universidad de California en San Francisco con pacientes con cáncer de próstata que habían rechazado un tratamiento activo contra el tumor. Los pacientes que cambiaron el estilo de vida (dieta vegetariana, vitaminas antioxidantes, ácidos grasos omega 3, ejercicio físico y cursos antiestrés) mostraron descenso del PSA frente a los que no realizaron esos cambios.

Además, a los 12 meses, el 12% de los pacientes que no habían cambiado su estilo de vida debieron ser operados por progresión de su cáncer, mientras que ninguno de los pacientes que habían cambiado su estilo de vida debió recurrir a la cirugía. Desde entonces se han publicado varias investigaciones comparativas en las que se demuestra que los cambios en la dieta de los pacientes con cáncer de próstata son útiles para reducir la progresión de la enfermedad tras el fracaso del tratamiento curativo con cirugía o radioterapia. Los agentes fitoterapéuticos (polifenoles) con beneficios potenciales en pacientes con cáncer de próstata son: catequinas del té verde, cúrcuma, granada, sulforofanos y indol-3-carbinol de las verduras crucíferas (brócoli, coliflor, repollo), ajo, setas (shitake, maitake), resveratrol (vino tinto), jengibre, licopeno (tomate), chocolate negro. Los mecanismos por los que se producen los efectos anticáncer se desarrollan a varios niveles celulares (inhibición de la proliferación, detención del ciclo celular, inducción de apoptosis, etc.). En una investigación llevada a cabo en Reino Unido, aleatorizado, los pacientes con cáncer de próstata localizado en vigilancia activa tratados con una cápsula que contenía granada, te verde, brócoli y cúrcuma mostraron a los seis meses que el PSA había subido una media del 9% mientras que en los que recibieron placebo el PSA subió un 80%. En otra investigación aleatoria elaborada en el Johns Hopkins Cancer Center (EEUU), pacientes con cáncer de próstata y elevación del PSA por fracaso del tratamiento inicial (recidiva bioquímica) recibieron 1 o 3 gramos de Granada por día durante 18 meses. El tiempo de duplicación del PSA (quemarca la evolución del cáncer) se alargó de 12 meses al inicio del tratamiento con granada a 18,5 meses a los 18 meses. En 13% de los casos el PSA descendió. En un 80% de los casos tratados con granada el PSA se estabilizó. En nuestras webs, en la pestaña “Consejos para pacientes con cáncer” encontrarán una amplia información sobre los efectos beneficiosos de la dieta en pacientes con diferentes tipos de cáncer.

Urología