El resultado de estos procedimientos puede ser duradero y efectivo, con la ventaja de no presentar efectos secundarios adversos.
La Medicina Regenerativa y el Nanofat: Un avance sorprendente
La Medicina Regenerativa, una rama relativamente nueva de la Medicina, utiliza las propias células del cuerpo para tratar diversas enfermedades. Con estas células, se abordan distintas patologías de manera efectiva.
El Nanofat, que significa "grasa pequeña", es una técnica innovadora que aprovecha la grasa extraída del abdomen o la cintura del paciente. Esta pequeña cantidad de grasa, alrededor de 20 centímetros cúbicos, se extrae con una cánula bajo Anestesia Local y se somete a un proceso de microfragmentación. Luego, se mezcla con Plasma Rico en Plaquetas (PRP), que se obtiene al centrifugar aproximadamente 10 centímetros cúbicos de sangre.
Las plaquetas en el PRP contienen factores de crecimiento que estimulan las células madre o mesenquimales. La mezcla resultante se inyecta en la zona deseada para su acción regenerativa.
Amplio uso del PRP en distintas patologías
El Plasma Rico en Plaquetas se utiliza en diversas áreas. En Flebología, se aplica en Úlceras Venosas para estimular la regeneración de tejidos. También se emplea en el tratamiento de Venas Varicosas.
En el ámbito estético, se inyecta de manera líquida en la dermis para rejuvenecer la piel, mejorar su luminosidad y estimular la producción de colágeno. En casos de Alopecia, se utiliza para detener la caída del cabello y mejorar la microcirculación del cuero cabelludo. Además, se combina con el Nanofat para tratar diversas afecciones, como Ojeras, Úlceras y Artrosis de Rodilla.
Factores de Riesgo
En la Medicina Regenerativa no existen contraindicaciones significativas, ya que se utilizan las células y los componentes del propio cuerpo del paciente. Sin embargo, es importante realizar una valoración completa antes de proceder. El resultado de estos procedimientos puede ser duradero y efectivo, con la ventaja de no presentar efectos secundarios adversos.
Beneficios
La Medicina Regenerativa ofrece una serie de beneficios notables. Utiliza las propias células del paciente, evitando Alergias y rechazos. Además, el procedimiento es rápido y seguro, con una duración de aproximadamente una hora o menos. En cuanto a las complicaciones, cuando se aplica con criterio, son extremadamente raras.
Los resultados comienzan a ser evidentes desde el principio. Si bien las células necesitan tiempo para transformarse completamente, liberan factores de crecimiento que mejoran los síntomas del paciente desde el principio.
En general, se establece una mejora significativa a los tres meses y, en algunos casos, los beneficios pueden durar hasta dos o tres años, dependiendo del paciente y la afección tratada. Estos procedimientos prometen una recuperación más rápida y resultados duraderos, utilizando las propias capacidades regenerativas del cuerpo.