En los últimos años, la longevidad se ha convertido en un tema de interés mundial. Si bien existen suplementos, tratamientos y terapias que prometen extender la vida, la verdadera pregunta es: ¿qué hacen las personas más longevas del planeta para llegar a los 90 o incluso a los 100 años?
La respuesta no está en un medicamento ni en un suplemento milagroso. Su secreto radica en la forma en que viven día a día, siguiendo hábitos simples, sostenibles y profundamente conectados con su entorno. El objetivo no es únicamente sumar años, sino también sumar calidad de vida.
La Dra. Georgina Signes comparte los cinco pilares fundamentales que sostienen una vida larga y plena. No se trata de cambios drásticos, sino de pequeños ajustes que, incorporados con constancia, pueden marcar la diferencia.
Pilar 1: Nutrición real, no de etiquetas
La alimentación es la base de una vida saludable. La clave está en priorizar alimentos naturales, evitar ultraprocesados y respetar los tiempos de comida.
Recomendaciones:
- Consumir vegetales, proteínas de calidad y grasas saludables.
- Evitar productos enlatados, empaquetados o ultraprocesados.
- Escuchar al cuerpo para identificar el verdadero hambre y saciedad.
- Mantener una hidratación adecuada con agua que aporte minerales esenciales.
Pequeño cambio sugerido: reemplazar harinas refinadas por alternativas como harina de almendras o coco, y reducir el consumo de azúcar y dulces.
Pilar 2: Movimiento constante, no solo ejercicio
Las personas longevas se mantienen activas de manera natural, integrando el movimiento a su vida cotidiana. Caminar, trabajar en el jardín o realizar actividades manuales aportan grandes beneficios a largo plazo.
Pilar 3: Sueño de calidad, no solo cantidad
Dormir bien es fundamental para la regeneración celular y el equilibrio del organismo. La higiene del sueño es tan importante como la duración.
Recomendaciones:
- Dormir al menos 7 horas en un ambiente oscuro y fresco.
- Exponerse a la luz natural al despertar.
- Evitar pantallas antes de dormir y mantener un horario regular.
Pequeño cambio sugerido: usar luces cálidas durante la noche, retirar el teléfono de la habitación y desconectar el wifi antes de acostarse.
Pilar 4: Estrés bajo control, no ignorado
El manejo del estrés es determinante para la longevidad. Aprender a reconocerlo y gestionarlo de forma consciente evita el desgaste físico y mental.
Recomendaciones:
- Practicar técnicas de relajación como respiración consciente o meditación.
- Fomentar una mentalidad positiva y de gratitud.
- Salir del “piloto automático” y vivir con mayor presencia.
Pequeño cambio sugerido: dedicar 5 minutos al día a respirar profundo y liberar tensiones.
Pilar 5: Conexión con la naturaleza y con los demás
La vida en comunidad y el contacto con la naturaleza refuerzan tanto la salud emocional como la física. Mantener vínculos significativos y un propósito vital son factores claves para una vida plena.
Recomendaciones:
- Compartir tiempo con familiares, amigos o comunidad.
- Pasar tiempo al aire libre, caminar descalzo, tomar sol y respirar aire puro.
- Encontrar un propósito que genere motivación y sentido.
Pequeño cambio sugerido: buscar momentos semanales para convivir con otras personas y realizar actividades en la naturaleza.