La primera visita al urólogo

La primera visita al urólogo

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Escrito por: La redacción de Top Doctors
Editado por: TOP DOCTORS® el 23/04/2019

 

¿A qué edad debo asistir a una evaluación urológica?

 

Las enfermedades urológicas afectan cualquier edad, aunque son más frecuentes en la edad adulta. En los niños la patología suele ser diferente, lo que ha motivado la aparición de una subespecialidad, la urología infantil. En el adulto son muchas las patologías que le pueden afectar: infecciones, litiasis, tumores, infertilidad, impotencia o disfunción eréctil, incontinencia urinaria etc. El paciente debe acudir a valoración urológica en el momento que presente cualquiera de estas patologías con independencia de la edad. En cualquier caso, se recomienda que los varones mayores de 50 años acudan a revisión prostática tengan o no síntomas

¿Los urólogos también visitan a las mujeres?

 

Por supuesto. Aunque la creencia popular es que el urólogo es un médico de los hombres, ya que hay enfermedades urológicas que sólo afectan al sexo masculino (como la próstata) o son más frecuentes en varones (como los tumores urológicos y la litiasis) muchas de las enfermedades que trata el urólogo afectan también a las mujeres y en algunos casos con mayor frecuencia, como por ejemplo las infecciones de orina y la incontinencia urinaria.

 

¿A qué edad debe un hombre valorarse para descartar cáncer de próstata?

 

Se recomienda la primera evaluación para el diagnóstico precoz del cáncer de próstata a los 50 años. Para ello hay que realizar un análisis de sangre (PSA) y una exploración de la próstata o tacto rectal. En los pacientes con antecedentes familiares de cáncer de próstata (fundamentalmente padre o hermanos) se recomienda iniciarlo antes a los 40 – 45 años.

 

¿Se pueden prevenir las enfermedades urológicas?

 

Hay una medida común recomendable para prevenir todas las enfermedades urológicas que es una ingesta líquida adecuada. En general se recomienda beber sobre 2 litros de agua en invierno y 2,5 litros en verano como mínimo. Hay una forma simple de controlar si la ingesta líquida es adecuada y es el color de la orina, que tiene que tender a ser incolora.

En los pacientes con litiasis o cálculos en el riñón se recomienda además reducir el consumo de sal y de proteínas. Una creencia equivocada es restringir el consumo de leche y productos lácteos, una medida que no sólo no es recomendable sino que es contraproducente. 

En las pacientes con infecciones urinarias de repetición evitar el estreñimiento, lavado adecuado de genitales siempre de delante hacia atrás, orinar con frecuencia, orinar y lavarse tras las relaciones sexuales. No hay evidencias científicas claras que la toma de arándanos, tan en boga en la actualidad, tenga una eficacia clínica demostrada.

Finalmente en los pacientes con patología prostática mantener relaciones sexuales regulares y frecuentes, evitar el estreñimiento, no montar en bici, moto o a caballo, restringir el alcohol de alta graduación y bebidas como la coca-cola, el té y café, no retrasar en exceso las ganas de orinar y no hacer excesos alimentarios en especial picantes, especias y espárragos.

En especial en los pacientes con cáncer de próstata es muy recomendable unos hábitos dietéticos adecuados, es decir, una dieta lo más mediterránea posible aumentando el consumo de vegetales ricos en antioxidantes como el tomate, la calabaza, las uvas, la soja, etc y evitar comidas con alto contenido en grasas, en especial las de origen animal, para reducir el sobrepeso y la obesidad.

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