La cirugía es el único tratamiento definitivo de hernia inguinal
Llamamos hernia inguinal a la salida de algún contenido de la cavidad abdominal, a través de un orificio en la zona inguinal. El contenido que se desprende puede ser simplemente grasa o asas intestinales.
Este tipo de hernia es más frecuente en hombres que en mujeres.
Causas de la Hernia inguinal
Existen dos tipos de causas para estas hernias:
- Hernias congénitas: se producen por una falta de cierre en el conducto inguinal que sale de la cavidad abdominal hasta el escroto, conducto donde se encuentran las venas y arterias que van al testículo. Al no producirse un cierre en dicho conducto, también pueden salir las asas intestinales. Este tipo puede ser evidente al nacer, pero también pueden dar síntomas cuando en edades más avanzadas.
- Hernias adquiridas: la realización de esfuerzos, como por ejemplo, esfuerzo en las defecaciones, tos persistente, levantar objetos pesados, etc … juntamente con un deterioro de los tejidos fibroconectivos de la ingle, causan la aparición de la hernia inguinal. En definitiva cualquier actividad que eleve la presión intraabdominal, además de los ejemplos citados también están: sobrepeso o aumento del tamaño de la próstata que condiciona un esfuerzo para la micción.
Síntomas de Hernia inguinal
El síntoma más común es la aparición de una protuberancia en la ingle, que en muchas ocasiones no origina dolor, aunque a veces presenta molestias o dolor leve que aumenta con la deambulación o la realización de algún esfuerzo. Normalmente cuando la persona se encuentra tumbada no se aprecia esta protuberancia.
La complicación de la hernia inguinal es su estrangulamiento, esto se produce cuando, por distintos motivos, existe una salida de mayor contenido abdominal hacia la hernia y ésta ya no puede volver a su lugar. Entonces existe dolor en la zona, signos inflamatorios en el bulto inguinal (color rojo, caliente, más duro) y también se acompaña de nauseas, vómitos y molestias abdominales. Si esto sucede se requiere una cirugía urgente.
Cómo detectar una hernia inguinal
El diagnóstico de la hernia se realiza mediante la exploración física por parte del especialista, así como en situaciones de duda se puede realizar una ecografía.
La cirugía, tratamiento definitivo para la hernia inguinal
La cirugía es la única solución definitiva para la hernia inguinal.
Actualmente el especialista cirujano realiza la reparación de la hernia inguinal mediante la colocación de malla o prótesis, por dos motivos fundamentales:
- Por un lado, si se realiza una sutura del tejido deteriorado, las probabilidades de recidivas son mucho mayores.
- Por otro lado, la reparación con malla permite una menor tensión de las líneas de sutura y ello conlleva un menor dolor postoperatorio, menos tiempo de recuperación y unos mínimos índices de recidiva.
Existen diferentes técnicas quirúrgicas tanto laparoscópicas como cirugía abierta. De estas últimas, las más empleadas en la actualidad son la técnica de Lichtenstein (técnica sin tensión que se basa en la colocación de una malla como reparación del orificio herniario) y la de Rutkow-Robbins, en la cual se emplea además de la malla, un cono o plug que se introduce en el orificio herniario. Utilizando estas técnicas se obtiene unos índices de recidiva inferiores al 1%.