“El dolor en el hombro es el segundo motivo de atención en nuestras consultas”

Por la práctica de algunos deportes, en los jóvenes, o el deterioro articular, en los mayores, el hombro se ha convertido en motivo frecuente de atención en las consultas traumatológicas. El doctor Manuel Mendoza, responsable de las patologías del hombro de la Unidad Multidisciplinar de Traumatología y Ortopedia de la Clínica Tres Torres, nos explica las principales dolencias del hombro y los últimos avances en su tratamiento.

¿Cuál es la incidencia de la patología del hombro en una consulta de traumatología?

La realidad es que las consultas por dolor en el hombro han aumentado de forma considerable en los últimos años. Diría que el hombro se ha convertido en la segunda articulación motivo de consulta después de la rodilla y dentro de las lesiones en el aparato locomotor.

Entre los jóvenes, el aumento de los deportes de contacto y de lanzamiento está causando un incremento de las tendinopatías por sobreuso y de la intestabilidad de hombro. En la población de mayor edad, el deterioro articular y de las estructuras tendinosas, el dolor nocturno y la incapacidad para llevar a cabo actividades de la vida diaria son las causas más frecuentes de consulta.

 

¿Cuáles son los avances más importantes en el diagnóstico y tratamiento de las lesiones en el hombro?

Sin duda, destacaría dos: la resonancia magnética y la cirugía artroscópica. La RMN nos aporta un claro diagnóstico de la lesión tanto cuantitativo como cualitativo. Gracias a la artroscopia podemos reparar esa lesión de manera semiinvasiva, sin grandes incisiones quirúrgicas.

Entre los avances también debemos subrayar el gran progreso experimentado en materiales biocompatibles para reparar fracturas o en el capítulo de prótesis en el caso que se precise su sustitución articular, como ocurre en la cadera o la rodilla.

 

Doctor Mendoza, nos ha hablado de los jóvenes deportistas y de las lesiones que padecen: inestabilidad, luxación… ¿Cómo les afectan estos problemas?

Disminuyen su rendimiento de forma considerable. Aparece un síntoma que se llama “aprehensión”, es decir, la sensación o confirmación de que en un momento determinado sufrirá una luxación y, en ocasiones, deberá acudir a un servicio de urgencias. Además, este tipo de lesiones presentan dolor y obligan a abandonar la actividad deportiva, asociando fatiga al esfuerzo.

 

En el caso de la población adulta por encima de los 40 años, ¿cómo afectan las lesiones de los tendones del hombro en el día a día?

Casi siempre con dolor nocturno, que impide conciliar el sueño al dormir del lado afectado, y con problemas o incapacidad para levantar o mover la mano por encima de los hombros; o en el caso de las mujeres, de no poderse cerrar el sujetador por detrás. Actividades como vestirse, abrocharse el cinturón de seguridad del coche o asearse producen dolor y dificultad para realizarlas. Para que esto no suceda los tendones del hombro deben estar en perfectas condiciones y ser reparados antes de que se instaure una severa artrosis evolutiva.